Domingo 18/07/10 Canovelles-Premià de Mar

Como cada domingo hemos quedado los Coyotes-Bikers en nuestro cuartel general para realizar la salida de hoy: una visita a la playa para darnos un merecido bañito.

Así pues Raúl, Sergio, Alfonso, Jose, Jordi, Toni y Rafa hemos salido poco después de las siete de la mañana rumbo a la costa.

Primeramente nos hemos dirigido a la estación de autobuses de Granollers para seguir dirección a la Serra de Llevant, donde hemos pasado por el Centre Montserrat Montero. Poco después Rafa ha pinchado y nos hemos tenido que parar para cambiar la cámara. Hemos atravesado los alrededores de la prisión de Quatre Camins y seguidamente hemos continuado hasta la carretera de Valldoriolf; la hemos cruzado y nos hemos dirigido hasta Vilanova, después de atravesar las obras del AVE.

Tras pararnos en la gasolinera para acabar de meter presión en la rueda de la bicicleta de Rafa, hemos continuado hacia la urbanización de Can Rabassa para ascender por unas de sus calles la primera rampa (suave por cierto) del día.

Después del pequeño ascenso, hemos bajado hasta Vallromanes. Hemos atravesado el pueblo como siempre y hemos comenzado el ascenso, no muy duro pero sí continuado, hasta el Coll de Claus. Una vez aquí nos hemos reagrupado, para rápidamente continuar nuestra marcha.

Así pues, hemos reanudado la ruta por nuestra izquierda, en dirección al Mirador de la Cornisa, donde hemos llegado poco después sin que nadie se parase a echar al menos un vistazo a la gran ciudad desde el mirador. Nos esperaba el descenso y el baño en la playa.

Poco después de dejar atrás el Mirador de la Cornisa, tomamos un camino a nuestra derecha que en rápido y vertiginoso descenso por una pista ancha, llena de surcos y muy arenosa nos deja en la parte alta de Premià de Dalt. Atravesamos este pueblo y poco después nos encontramos en Premià de Mar.

Una vez en Premià de Mar, recorrimos sus calles hasta que nos llevaron a nuestro objetivo de hoy: la playa y el mar.

Hicimos una buena parada para almorzar y por supuesto darnos un merecido baño de agua salada, en una mañana que ya a estas horas era calurosa y presagiaba un día aún más.

Después de arreglarnos y volver a ponernos los uniformes de coyotes, decidimos seguir nuestra ruta sin más demora.

Así que fuimos costeando un buen rato, hasta legar a la carretera de Cabrera de Mar, en Vilassar. La tomamos y la seguimos hasta llegar a Argentona. Desde Argentona nos dirigimos al inicio de la antigua carretera de Parpers. Allí comenzó el ascenso a la collada de unos tres kilómetros con el asfalto ardiendo que casi derretían la goma.

Una vez en la collada pusimos rumbo a La Roca. La bajada fue muy rápida y con muchas ganas de llegar. Una vez en La Roca paramos en una fuente a reponer agua, pero Toni se dio cuenta que justo enfrente de la fuente podíamos reponer con otra clase de líquidos. La idea fue muy bien aceptada por lo que hicimos una pequeña parada técnica.

Después de esta parada volvimos a Canovelles por el camino más directo, donde llegamos alrededor de las 12:30 de la mañana después de haber recorrido 55,32 kilómetros en 3h 18’ de pedaleo y un baño de sales en compañía de los Coyotes.

El track de esta ruta lo puedes encontrar en:

http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=1035231